Mis planes y los planes del destino!

Cuando todo se opone. Que alguien me explique si la cuestión del destino le funciona a veces??? o se le avería de vez en cuando???? Pues a mi me dio por estar feliz para el pasado fin de semana, planeé una salidita con mi papá [que casi nunca veo] y mi hermana, íbamos a tomarnos algo tipo tranquilo, viernes en la noche, muy social, el sábado sería tranquilo con un amigo que venía de Caracas y al que por cierto adoro, nada muy complicado porque el domingo sería la ida al juego de Brasil- Venezuela [razón real por la que mi amigo se echó el viaje de miles de horas Caracas- San Cristóbal] , que aunque no me emocionaba demasiado porque soy de las niñas poco fanáticas del fútbol, me daba un poquito de alegría ir, por primera vez después de unos 20 años pisaría el Polideportivo de Pueblo Nuevo, echaría atrás mi aversión a la ida a juegos de fútbol, y vería a uno de los mejores equipos, mundialmente hablando, por si fuera poco vería a Kaká, no importa lo superficial que parezca, él es requete bello; la cosa es que estaba todo perfectamente planeado pero pues se hicieron las 5 de la tarde del día viernes y yo estaba al punto de un colapso, moría de escalofríos, el dolor de cabeza y el mareo no me dejaban ni bajar un escalón… Aaaay Caramba! Se estaban desmoronando mis planes del fin de semana! Y así fue, ¿resultado? No salí con mi papi a tomarnos algo sino a la clínica, una BRONQUITIS!!! Adiós a todos los planes, bienvenida a la fiebre, tristeza y mucho medicamento, pero es que el destino no ayuda cuando le da por jugar con nuestro ajedrez personal que llamamos a veces vida, no vi a mi amigo [sorry Alex], no fui al juego [sorry alex], perdió Venezuela [sorry Alex y al resto de fanáticos de la Vinotinto, pero era de esperarse tristemente para nosotros] , no he ido a trabajar [bien por mi] y me duele el pechito… ay ay ay el destino…

Por ahora en casa empijamada y enfermita, sorry por no leerlos y comentarlos con la frecuencia de siempre pero estaba enfermita…! Seguiré en mi plan de mejoría y dejaré que el destino se porte bien, porque AY del destino si me la hace otra vez!