...sin brújula

Aparte de creer ciegamente en lo que nunca he creído no ha pasado nada nuevo, sólo decidí echarme la soga al cuello por cuenta propia, quién mejor que yo para decidir que lo absurdo vale la pena, quién mejor que yo para no juzgarme cruelmente, quién mejor que yo para decidir a la ligera.


Una decisión sencillamente ha dado un vuelco total, siempre me he llenado la boca diciendo cuan madura y decidida soy, la verdad sólo soy una niña aterrada que ha perdido temporalmente su brújula, y no es la primera vez que lo hago, pero es la primera vez que lo admito.


A estas alturas no sé cuál es mi dirección, mucho menos el código postal del lugar donde vivo, hace años que no tengo un teléfono fijo al que me puedan llamar, pronto cambiará eso.


¿Qué si estoy segura?, la verdad ¿cuándo lo he estado?, sólo sé que ya el cambio no me da miedo, me dan miedo mil cosas pero el cambio no es una de ellas, sin duda es hora de madurar por cuenta propia, no de madurar a los golpes, es hora de asumir consecuencias y responsabilidades.


Ha llegado la hora de crecer, debo volver.

Comentarios

  1. Estar en una etapa de la vida en que el cambio no te da miedo es madurar...lo veo así, porque ese cambio siempre te va a enseñar algo que te dará una experiencia para los próximos momentos que sea necesario reflexionar...nunca cambies la niña que tienes por dentro porque la vida es un juego, que un rato nos permite sonreir, pero al día siguiente te puede dar un duro golpe...disfruta todo lo que puedas, siempre responsablemente, pero pensando primero en ti...t.q.m

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  2. Gracias mi yela... tus palabras son muy importantes... nos entendemos porque los cambios son en cierta forma generales, todos estamos viviendo más o menos situaciones así... éxitos pa ti mi china.... y acordaos que cuando haya trabajo soy la primera pa la rumba jeje pa eso son los amigos

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Ocurrencias y ocurrencias, para eso es esto ¿no? cuéntame...